En esta serie, varios planos conviven a un tiempo, creando un espacio inquietante y enigmático, aparentemente abstracto y que, sin embargo, es fiel reflejo de la realidad. Una realidad efímera y fugaz, fruto del instante, que marca con su presencia el ritmo vertiginoso de la ciudad, de los viajes, de los cambios, de la prisa y el caos de la vida cotidiana…y, de pronto, la imagen se congela, mostrándonos como en un hechizo, el equilibrio, la calma, el juego de luces y colores, y nos damos cuenta de que la belleza puede estar en todas partes si miramos con los ojos del alma.
En esta serie, varios planos conviven a un tiempo, creando un espacio inquietante y enigmático, aparentemente abstracto y que, sin embargo, es fiel reflejo de la realidad. Una realidad efímera y fugaz, fruto del instante, que marca con su presencia el ritmo vertiginoso de la ciudad, de los viajes, de los cambios, de la prisa y el caos de la vida cotidiana…y, de pronto, la imagen se congela, mostrándonos como en un hechizo, el equilibrio, la calma, el juego de luces y colores, y nos damos cuenta de que la belleza puede estar en todas partes si miramos con los ojos del alma.
La fuerza del origen. Exquisito rompecabezas. Pequeñas estructuras que van creciendo hasta conformar un todo. Cada una de esas pequeñas formas es un universo infinito, lleno de posibilidades. Y tras el aparente caos, la geometría siempre presente.
La fuerza del origen. Exquisito rompecabezas. Pequeñas estructuras que van creciendo hasta conformar un todo. Cada una de esas pequeñas formas es un universo infinito, lleno de posibilidades. Y tras el aparente caos, la geometría siempre presente.
Árboles alargados para los muy espirituales. De todos los colores, ¿cual es el tuyo?
La fuerza del origen. Exquisito rompecabezas. Pequeñas estructuras que van creciendo hasta conformar un todo. Cada una de esas pequeñas formas es un universo infinito, lleno de posibilidades. Y tras el aparente caos, la geometría siempre presente.